sábado, 21 de enero de 2012

Crónica del partido de basket cuarentón




Hace algún tiempo que teníamos pendiente materializar una petición para celebrar un partido de basket, que finalmente conseguimos llevar a cabo ayer 20 de Enero.
Fiel a la tradición de narrar cada uno de los eventos cuarentones, y con mi habitual objetividad, independencia y rigor imparcial, trataré de dar una pincelada de lo que fue tan magno evento.

El partido reunió a la flor (la nata no vino, o no se enteró) del baloncesto cuarentón. La convocatoria consiguió cubrir dos quintetos completos, aunque quedó patente la falta de banquillo, ya que solo se contaba con un jugador de reserva por alineación. Hubo un a mezcla entre figuras clásicas que alineaba el equipo del cole hace más de un cuarto de siglo, eternos aficionados de gran nivel que nunca lo dejaron y gente de medio pelo (como servidor) que nos limitamos al 21 con nuestro hijo en el parque. Estuvimos por la D: Alex, Bernardo, Eze, Jose Antonio, Pedro y yo, y por la B: Juan, César, Pablo, Pitu, Vicente, Jaime y Javi.

La afluencia de público no jugador fue ínfima, limitándose a Luis Moreno y a la hija de Pedro que aplaudieron al equipo de la D hasta dejarse las palmas rojas .

Para la preparación del choque, configuración de jugadas y estrategia de juego de la D, estuve haciendo consultas previas a los mejores asesores que conseguí encontrar.Valga esta foto como muestra.

Una vez más ese eterno pique entre las dos magnas letras, D y B, afloró y puso la nota de sana rivalidad, pundonor y entrega en un partido disputado a un ritmo frenético y trepidante, que exigió un esfuerzo cardiopulmonar extra a todos los participantes (salvo a Vicente que corría sobrao, de canasta a canasta). La cercanía de los excesos navideños pesó en el ánimo de más de uno, que anduvo ligeramente congestionado, exigiendo una rotación de banquillo continua.

Las ganas de ganar del combinado de la D no fueron suficientes contra el enemigo natural. La falta de acierto en el tiro exterior y la férra defensa al hombre del contrario, unidas a una notable diferencia en centrímetros, entre uno y otro equipo, abrieron una brecha en el tanteo que no hubo forma de cerrar.

Aunque nos duela, hay que hacer una mención especial a la figura del partido, Juanito Cavestany. El pivot rival, tuvo una de las actuaciones más brillantes de toda su carrera. Debió ser el único que aguantó sin cambiarse todo el partido (que fue disputado a tiempo único, corrido y sin descanso, de una hora) y exhibió un poderío bajo los aros y un acierto encestador asombroso. Esa noche le entraba continuamente todo.

Dado que no había medios para hacerle un control antidoping, siempre nos quedará la duda sobre si su rendimiento y energía venían motivados por una sobreingesta masiva de antigripales y otra farmacopea diversa. El mismo reconoció antes del inicio haber estado un par de días antes, muy griposo, hecho una braga y tomando cosas diversas.

En cualquier caso todos tuvimos nuestro momento de gloria y quien más quien menos destapó el tarro de la esencias en jugadas de todo tipo. Las personales apenas contaron y palos hubo unos cuantos, pero la alegre deportividad estuvo por encima de la rivalidad.
Podemos decir además con alivio, que no hubo lesiones. Estas en el basket y a nuestra edad son un riesgo cierto que sorteamos con éxito, siempre que obviemos que a Bernardo estuvo a punto de darle un infarto, je,je,je...

El resultado final fue un cincuenta y tantos a no se cuantos, a favor de la B. Lo cual nos anima a seguir luchando sin dar por perdida la batalla para un nuevo pique. Los de la D tenemos cuerda para rato.
Al final en amigable camaraderia, fuimos al bar más cercano, donde por cierto estuvimos al borde de caer deshidratados y extenuados por la sed; ya que tardaron un huevo en ponernos unas merecidas cañas, pues que tuvieron que cambiar el barrril y eran lentos de narices tirándolas.

Fue una tarde sana y divertida de la que todos disfrutamos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Fuen una lástima que a última hora no pudiera ir, pero por lo leido, veo que tampoco hacía falta mi colaboración . De nuevo, la B , ya sea al fútbol, basket o mús, está muy por encima de la D .
Un abrazo a todos .

Eves

estadística a tope dijo...

Hola chavales, soy balmisa (estuve en la B).Veo que seguís jugando tan mal como hace 25 años, es impresionante el salto para vencer la gravedad!. Enhorabuena. Si lo hubiera sabido os hubiera echado una mano para pasar de las 3 canastas. Por cierto no habéis invitado a las compañeras tan guapas que había en la B: marta, regina,etc Muchas gracias por este blog de los cuarentones tan entrañable